miércoles, 30 de octubre de 2013

Bibliografía consultada

Bibliografía

  • Castillo Martinez de Olcoz, Ignacio Javier (2006). "Sentido de la luz. Ideas, mitos y evolución de las artes y los espectáculos de la luz hasta el cine" - Tesis Doctoral - Universitar de Barcelona. Departament de Disseny i Imatge - disponible en: http:/www.tdx.cat/handle/10803/1378
  • Homar, Alfonso Romero (s.f.). "La luz en el arte" - Ministerio de Educación Instituo de Tecnologías Educativas - disponible en: http://ntic.educacion.es/w3/eos/MaterialesEducativos/mem2006/luz_arte/index.htmal 
  • Guia para usar la luz para ilustradores, dibujantes, pintores, interioristas y artistas – de Richard Yot, Editorial Blume, 2011

      http://www.educaplus.org/play-136-Sombra-y-penumbra.html

      http://lema.rae.es/drae/srv/search?key=penumbra

      http://artecomplemento.wordpress.com/cinetismo/

  • La iluminación de tres puntos, Universidad Nacional de La Plata: http://www.fba.unlp.edu.ar/ingreso2010/comisiones/ingreso%20para%20la%20WEB/textos_ingreso_cine/Texto s%20Ingreso%20Cine/La%20Iluminaci%C3%B3n%20de%203%20Puntos.pdf

  • Arte cinético:  Grupos, movimientos y tendencias de arte contemporáneo desde 1945. Biblioteca de la mirada, dirijida por Guido Indig. La Marca, Editora. Fecha de impresión: 2010.
  • http://www.julioleparc.org/es/text_detail.php?txt_cat_id=2&txt_id=10 LE PARC
  • http://www.historiadelarte.us/las-vanguardias/el-lenguaje-cientifico-del-arte.html


Infografía III


Infografía II


Infografía I




miércoles, 23 de octubre de 2013

¿Cómo trabajan los artistas vanguardistas y contemporáneos con la luz artificial en las artes cinéticas? ¿Qué artistas conocidos se pueden citar que trabajen con la luz como elemento activo configurante de la obra de arte?

Los artistas vanguardistas y contemporáneos trabajan con la luz artificial en las artes cinéticas organizando estructuras complejas y se vuelve un observador sensible de su ambiente, en estas obras el artista permite que el espectador se vuelva activo y creativo.
Esta actividad del artista se da principalmente en el campo de la escultura donde Intervienen máquinas de distintas formas: accionadas por un motor eléctrico, o activadas por manivelas, poleas, palancas, etc. Pictóricamente, el arte cinético se puede basar en las ilusiones ópticas, en la vibración retinaria y en la imposibilidad de nuestro ojo de mirar simultáneamente dos superficies coloreadas, violentamente contrastadas.
La luz puede acompañar a movimientos espaciales o actuar aisladamente de un modo no -  espacial, pero siempre es el elemento activo de todo posible movimiento. De este modo se transforma en primordial ya que el luminismo se caracteriza por el cambio de color, de la luminosidad, de la trama, etc.

Las experiencias con la luz y el movimiento se relacionan directamente con la idea de alejarse de la obra fija, estable y definitiva. El espectador se encuentra rodeado o delante del desarrollo de una multitud de cambios, acentuándose el soporte uniforme de los elementos y formas, sin distraer la inestabilidad puesta en evidencia.

Artistas que trabajan con la luz como configurante de la obra.
Julio Le Parc (Argentino) y Gianni Colombo utilizan las posibilidades que ofrece la transparencia, y juegos de luz (prismas).
Con ayuda de luz artificial, electrónica, y cibernética, este arte se orienta hacian nuevas expresiones: la luminocinética, el arte tecnológico y el arte medioambiental. 

Julio Le Parc

Gianni Colombo


¿Cómo trabaja la arquitectura barroca con la luz? ¿Qué simbología tiene la luz en esta manifestación artística?

Por regla general, hay que partir del pensamiento de aquella época para estar en condiciones de entender el valor que el escultor barroco atribuye a la luz, a este elemento, tan indispensable como inefable, para la plasmación del virtuosismo plástico.
Nos remitiremos a la inteligente síntesis elaborada por Francesco Patrizi, que considera la luz como atmósfera metafísica global, que genera a su vez los "rayos" que dan vida a la lumen en sentido estricto:
«La luz es imagen de Dios mismo y de su bondad, que ilustra todo lo supramundano, que se extiende por todas partes y lo penetra todo. Al penetrar las cosas, las forma y las hace. Lo vivifica todo, lo contiene todo, lo sostiene todo, reúne y unifica todo. Envuelve en sí misma todas las cosas que existen, o están iluminadas, o viven, o se engendran, o se nutren, o crecen, o se completan, o se mueven.
La luz las purifica, las completa, las renueva, las conserva y hace que no perezcan. No carece de nada, es rica en todo. Anhelada por todos y deseable para todos. Adorno de los cielos y de todos los cuerpos, nobleza del mundo, hermosura del mundo, alegría del mundo, risa del mundo. Nada es tan alegre para la mirada, nada más agradable al ánimo, nada más fortalecedor para la vida, nada más importante para el conocimiento, nada más útil para la acción. Sin ella, todas las cosas quedarían inmersas entre tinieblas, inertes en sí mismas y desconocidas para nosotros».

El escultor barroco conoce el valor de la cámara de luz, de la luz de fondo y de la luz que se refleja.

En la capilla Raimondi de San Pietro in Montorio se abren dos ventanas a los lados del grupo escultórico, invisibles para quien están en el interior de la capilla, que brindan un intenso efecto de luz que cae sobre el bajorrelieve esculpido por su discípulo Francesco Baratta. 

La imagen del santo que sube a los cielos casi da la sensación de flotar en la auténtica atmósfera del empíreo.

En la capilla Alaleona de Santi Domenico e Sisto la luz procedente de arriba crea un efecto de contraluz, envolviendo al grupo de Cristo y la samaritana en la ambigüedad de un teatro viviente.

En los documentos llegados hasta nosotros se denomina «esplendor» a esta compleja estructura y, en efecto, la sensación de deslumbramiento se incrementa al pasar desde la verdadera luz que penetra por el vitral hasta los numerosos rayos dorados (de distinto grosor, con objeto de aumentar la vibración luminosa) que se refractan en las nubes curvadas como espejos, para multiplicar la iluminación.


Funcionamiento de la luz y la sombra en los relieves.

De una manera general, los escultores de periodos arcaicos y los de la Alta Edad Media no han buscado crear una ilusión de profundidad real y han ignorado los procederes ópticamente eficaces del modelado y de la sombra de alcance. Ellos, al contrario, han optado por los contornos lineales, aplanados luminosos y los surcos de sombra, diseñados con la ayuda de rayas incisas. Tienen en este sentido selecto una parte gráfica y decorativa de distribución de las sombras y de las luces. El sistema medieval de reparto de las sombras y de las luces se opone al sistema del siglo XV, según el cual las sombras y las luces se distribuyen largamente de manera de subrayar la importancia de ciertos volúmenes y crear fuertes contrastes entre los salientes y los huecos: escultura “bourguignonne” borgoñona.
En el siglo XVII, la distribución de las sombras y de las luces sobre los relieves permitió valorar ciertas partes de la figura: oposición contrastada entre el tratamiento de los bustos desnudos, con un modelado suave y matizado, y el tratamiento de los ropajes, con huecos profundos, cubriendo la talla y las jambas.

A veces, las sombras y las luces han contribuido a acentuar los movimientos de las figuras y a acentuar las formas.
Ejemplo de esto: 

Bajorrelieve tallado en piedra en la iglesia visigótica de Santa María de Quintanilla de las Viñas, en la provincia de Burgos. 

Un bajo relieve hecho para que la luz cree un efecto pictórico, las sombras y las luces se multiplican a propósito sobre todas las superficies. Los perfiles de los pliegues están quebrados, impidiendo así a la luz dar una arista demasiado aguda o dibujar una sombra demasiado limpia. Los contornos delimitados por planos diversamente orientados, están de alguna manera disueltos e interrumpidos voluntariamente por los “accidentes”, originando un desorden pictórico y pintoresco. Por otro lado, cada parte parece "avanzar o recular en el espacio", parece moverse en el plano y no ofrece a la mirada ninguna nitidéz ni ningun reposo. Esta manera de distribución de las sombras y de las luces que corresponde a un modelado contrastado es frecuente en el siglo XVIII, en el arte barroco.

A partir de la época clásica, el emplazamiento y la iluminación de los relieves condicionan el tratamiento de sus salientes.
Porque, como precisa Falconet, «en una obra de escultura, compuesta para producir luces y sombras armoniosas, haciendo venir de la derecha la luz que venía de la izquierda, o de abajo aquella que venía de lo alto; no se encontrarán más efectos: la mayoría desagradables, si el artista no ha sabido tener cuidado con las diferentes luces».
La naturaleza de los materiales utilizados y el tratamiento de las superficies, superficie pulida, rugosa, o una superficie llena de trazas de herramientas más o menos profundas o largas, intervienen igualmente en los efectos de sombra y de luz.
Los materiales opacos pulidos, en una luz viva, reflejan los rayos luminosos con intensidad en cada punto de incidencia y ofrecen más fuertes contrastes que los materiales mates: las partes claras y sombreadas resaltan menos. Así, en el bronce, el efecto procede por bruscos resaltes que van del brillante al negro profundo; un tono neutro y opaco envuelve la unión, y así como el  mármol parece retener y absorber la luz, el bronce la refleja. Inversamente, los materiales mates tienen un aspecto más uniforme, algo más vivo, en los lugares alcanzados por los rayos luminosos. Así, el mármol, hasta que no está pulido, tiene sus superficies sobre las cuales la luz y la sombra se juntan armoniosamente.
En cuestión de pulido se ha de valorar y matizar con gusto y buen criterio lo que necesita cada pieza. En el mármol se ha de tener en cuenta su color ya que si es negro un pulido excesivo de la pieza, actuaría de espejo reflejando las formas de las luces, y no dejando ver de ninguna manera la forma o el modelado, a algunos artistas ya les va bien, así disimulan los defectos de forma de la escultura.

Hoy con los materiales modernos: plásticos, resinas, fibras y pigmentos adecuados nos permiten la creación en escultura, de nuevos efectos luminosos.
En el siglo XX, los escultores han utilizado la luz deliberadamente como elemento plástico. La luz reflejada, que juega sobre las formas pulidas, ha sido empleada para contribuir a los efectos de reflejo y de contraste, por ejemplo las esculturas pulidas de Brancusi


Constantin Brancusi: simplificación de la forma, bronce pulido, respetaba y aprovechaba la belleza natural de los materiales y sus contrastes.


Un ejemplo de trabajo específico con la luz, sería la escultura en bronce de Pablo Gargallo, realizada en 1928 que se titula “Kiki de Montparnasse”, es una cabeza de bronce hueca, es como un huevo de chocolate, tiene sólido el pelo, el perfil de la nariz, la boca y la barbilla, el bronce está completamente pulido y el hueco oscuro nos hace intuir sus facciones



Influencia de las diferentes fuentes de luz en la escultura tradicional.

El escultor o maestro de talla, como se le llamaba antiguamente, ha estado unido a la   arquitectura trabajando para ella a las órdenes de arquitectos, ya que la escultura era un ornamento de la arquitectura, o una parte de ella.
La escultura exenta aparece en Grecia y después con las primeras imágenes religiosas en función a necesidades religiosas, las que han variado en el tiempo y evolucionado como las modas.

La escultura ha estado bajo diferentes fuentes de luz, ha sido iluminada normalmente por la luz del sol, estando siempre realizada previendo la luz que tendría en el lugar donde iría colocada.
Si estaba en el exterior: se pensó para la luz del sol directa.
Si estaba en el interior: se pensó para la luz de las velas, ventanas o vitrales de las grandes catedrales.
Es fundamental para la escultura, para la forma, que reciba una luz del sol difusa.


En la forma no han de predominar los negros, las sombras acusadas. Los valores de negro muy potentes restan importancia a los volúmenes. Cada escultura podrá tener más o menos negros según la luz que reciba. Refiriéndose con negros a los vacíos donde la luz no puede ser despedida, reflejada.

Hay ejemplos claros en la historia que nos ayudan a entender mejor:
·         
   Esculturas griegas: La mayoría de las esculturas griegas exentas, situadas a derecha e izquierda de las vías principales de las ciudades, tienen la nariz y la frente unidas.
Los griegos, conocedores del tratamiento de la luz, fundían la frente con la nariz para evitar la sombra provocada en la unión de los volúmenes.
Si la cara de la escultura se realizara realmente igual a la de los modelos naturales, tendríamos entonces, entre la frente y la nariz, una línea horizontal oscura que además juntándose con las sombras de los espacios de los ojos crean un negro y hacen desaparecer la unión de la nariz con la frente.



En escultura, la luz y la sombra se alían para subrayar las formas, en particular en la escultura romana, la cual les hace girar, las anima, a veces acentúa su relieve o incluso sugiere el movimiento.
La luz y la sombra tienen una importancia considerable porque contribuyen a la creación de las formas o a su destrucción: iluminación mal estudiada aplanando los relieves o creando sombras indeseables. Las obras esculpidas están siempre a merced de la luz que reciben, contrariamente a las pinturas donde las luces son inmutables y fijadas una vez por todas especialmente para la pintura.

Según Baudry, existen dos tipos de sombra en escultura, la sombra propia y la sombra de alcance.
·         Sombra propia es la que da el cuerpo a cada volumen y que resulta de la inclinación o del cruce de diferentes superficies constitutivas de formas, mientras que la sombra de alcance es la que proyectan los diferentes elementos de la figura sobre la superficie del muro, sobre el suelo, o sobre el fondo si es un alto relieve o bajo relieve.

La distribución de las sombras propias y el cálculo de las sombras de alcance en función de la dirección y de la naturaleza de las fuentes luminosas (sol, luz difusa) representan una parte importante de la composición de las estatuas y de los relieves. De hecho, el escultor “crea”, en alguna forma, las luces, las sombras propias y las sombras de alcance de sus obras porque él coloca los salientes y los huecos.

La alianza de la luz y de la sombra se da en escultura de muchas maneras: tan pronto de manera tajante, cuando los planos de las formas se juntan en ángulos vivos, sin transición; como tan pronto de manera suave, cuando los planos se unen unos a otros por progresiones sutiles, entonces las transiciones se enriquecen de reflejos: esto que hace decir de una escultura que tiene “color”.
Existe entre los claros vivos, correspondiente a las partes salientes, y las sombras fuertes de los huecos, una variedad de tonos más o menos claros, más o menos oscuros. El modelado es entonces un sistema de valores que depende de la fuente luminosa y del tratamiento de las superficies, puesto que ella no existe más que en la medida de como figuran sobre ellas los salientes y los huecos.

Relación entre la luz y la sombra. ¿Que se entiende por sombra y penumbra?. Tipos de sombra.

La sombra es uno de los fenómenos naturales más enigmáticos que el hombre ha sabido convertir en símbolo: símbolo del mal y de la muerte, del doble, del alma y del espíritu.
Podemos tener luz todo el día en tanta cantidad, una luz de calidad y en cantidad, que anulamos las sombras. En nuestras casas la sombra está muerta o “matada” por la luz. Antiguamente las luces de las velas y lámparas, creaban sombras en movimiento, sombras vivas.
Podemos concebir la oscuridad sin luz, pero la sombra sin luz no.
La sombra aparece siempre por gradación o por contraste, nunca por exclusión.
El abuso de la luz eléctrica nos ha hecho olvidar cualidades intrínsecas de la iluminación natural, siendo una de ellas la sombra. También la variación de la luz, de su color y de su intensidad por medio de su difusión y reflexión, originada al atravesar las diferentes capas de la atmósfera y reflejarse en los materiales opacos de la naturaleza.
La sombra hace que el hombre se pueda ver a sí mismo, el hombre no se puede ver hasta que no contempla su silueta en la sombra. La sombra nos da la tercera dimensión.
Un cuerpo opaco situado en la trayectoria de la luz impide que ésta se propague y crea una zona oscura que se llama sombra, esta es una consecuencia directa de la propagación rectilínea de la luz.



Cuando la fuente de luz no es puntual, la sombra se divide en umbra y penumbra.
Cuanto más ancha es la fuente de luz, más difuminada o borrosa será la sombra.
La penumbra es una sombra débil entre la luz y la oscuridad, que no deja percibir dónde empieza la una o acaba la otra.


Existen dos tipos de sombras: las sombras de formas y las sombras de proyección. Las sombras de formas corresponden a las áreas sombreadas sobre una superficie a las que no puede llegar la fuente de luz. Las sobras de proyección son las que generalmente conocemos como sombras: las sombras proyectadas por un objeto sobre una superficie (como, por ejemplo, el suelo) cuando el objeto se encuentra entra la fuente de luz y dicha superficie. Las sombras son muy importantes en las artes visuales, ya que proporcionan solidez y forma y, a su vez, crean dramatismo y suspense.
            Si nos encontráramos en un lugar donde no hubiera ni luz de ambiente ni reflejada, como, por ejemplo, en el espacio, las sombras de forma y de proyección serian exactamente iguales: por completo negras.
            Sin embargo, aquí en la tierra, las cosas no son tan sencillas. La atmosfera actúa como un gigantesco difusor de la luz, dispersándola por todas partes. Además, nuestro planeta está repleto de superficies reflectantes que dispersan aún más la luz, lo que implica que las formas, en la mayoría de los casos, reciben algún tipo de luz secundaria. Por lo general, además dicha luz secundaria suele iluminar más las sombras de forma que la sombra de proyección.
            Cuando la luz revota sobre una superficie, extensa como el suelo, la luz reflejada proviene, obviamente, de una fuente de luz grande y, por tanto, brillante, lo que implica que la sobra de forma que se crea sobre la esfera está recibiendo bastante luz del suelo, además de la que proviene de la atmosfera.
            En el exterior, la sombra de proyección son mas oscuras que la sombra de forma. No obstante esto es solo una regla general.
            Las sombras de forma proporcionan profundidad a los objetos en especial si la iluminación es lateral. Además contribuyen en gran medida a transmitir la forma de un objeto. La ausencia de sombra de forma es el motivo por el cual la iluminación frontal puede llegar a tener un aspecto tan plano.
La sombra de forma también enlaza la textura. La textura también aparece enfatizada por la luz direccional, más intensa.
Así pues, la sombra de forma desempeña un papel muy importante a la hora de transmitir tanto la forma, como la textura de un objeto.



Tipos de iluminación.

Dependiendo de la utilidad que vayamos a darle a la luz, existen diferentes formas de iluminar las estancias, los objetos o las personas.

Podemos hacer iluminaciones generales o localizadas. En el mundo artístico encontramos luces artificiales en todos los campos y especialidades, desde la pintura, escultura y arquitectura hasta en las más modernas tendencias como las instalaciones, acciones etc., donde la luz tiene un protagonismo muy notable.

En la pintura podemos ver ejemplos de iluminaciones que muchas veces tienen estrecha relación con la época, las tendencias artísticas o los descubrimientos científicos del momento.

En la arquitectura predomina la luz artificial, en la era moderna donde la importancia a la decoración de interiores cobra protagonismo.


La iluminación general al principio era fundamental, ya que era un a luz potente que quería simular la luz del sol. 

Iluminación de tres puntos: Los libros de textos de 3D suelen hablar del ajuste clásico del iluminación de tres puntos e insisten en recomendar a los principiantes que lo usen como un método efectivo a la hora de iluminar sus escenas.

Inicialmente se creó como una forma de iluminar fotografías; su ventaja más importante es que es fácil de aprender y de entender. Se trata de una fuente de luz principal procedente de un lado, una luz de relleno procedente del lado opuesto y una luz trasera detrás del sujeto de la imagen (retroiluminación). Esta última se usa para remarcar los contornos y resaltar la forma. El principal problema que representa este tipo de iluminación es que es artificial y que no refleja la realidad. El uso de la retroiluminación se debería tener en cuenta en forma especial solo cuando se busque un efecto determinado, ya que se trata de una iluminación muy espectacular y es fácilmente identificable. La iluminación trasera puede resultar muy efectiva; no obstante, es recomendable usarla con criterio en lugar de ante cualquier situación. El tipo de luz que crea la iluminación de tres puntos no existe en la naturaleza, por lo que el resultado que se obtiene es artificial. 

Tipos de luz.

La evolución de las fuentes lumínicas ha sido continua.



Lámpara incandescente:
Consta de un filamento de tungsteno muy fino, encerrado en una ampolla de vidrio en la que se ha hecho el vacío o se ha rellenado con un gas inerte, para evitar que el filamento se volatilice por las altas temperaturas que debe alcanzar. Se completa con un casquillo metálico, en el que se disponen las conexiones eléctricas.



Lámpara fluorescente:
Consumen poca energía y ofrecen más luz por menos vatios.
Tienen una luz fría y es recomendable para usos muy prolongados. Tiene una vida útil de 10 veces más que la normal.





Lámpara halógena:
Producen luz intensa y son utilizadas para uso decorativo. Hacen que los colores se vean más nítidos a la vista, para resaltar objetos decorativos, acentuar muros o elementos arquitectónicos.
Aunque gastan la misma energía que las incandescentes, éstas tienen un mayor flujo luminoso y ofrecen una luz más blanca y brillante.


Lámpara de neón:
Se aplican en fachadas o monumentos, y su objetivo principal es la dramatización de exteriores.
Actualmente se utilizan mucho para le decoración de computadoras o autos.


Luz de diodos emisores (LEDs):
Son la última tendencia en iluminación, aportan muchísima más luz por la energía que consume sin producir calor, además de tener una vida útil más larga que la luz fluorescente. Si lo que queremos es conseguir una atmósfera especial empleando iluminación de color, los LED resultan de la mejor manera.
Debido al funcionamiento del dispositivo, la calidad de color que ofrecen es superior a la de cualquier otra luminaria: en los LEDs, el tono se produce desde el origen junto con la luz, en vez de ser un atributo “postizo”, conseguido por algún barniz que se dé a la ampolleta que lo contiene.
Una ventaja adicional es que no contienen sustancias que requieran algún tratamiento especial –como sucede con las fluorescentes–. Aunque son más costosos que las lámparas fluorescentes compactas, y muchísimo más que las incandescentes.

Diferencia entre la forma de proyección natural (solar) y la artificial. ¿Cómo se proyectan los rayos de la luz artificial? ¿Cuáles son sus características?

Las diferencias que hay entre la forma de proyección natural y artificial son:   

Con la luz artificial se pueden crear ambientes agradables o sobrecogedores, se puede llamar la atención de los espectadores, utilizándose incluso con fines medicinales, como es el caso de las lámparas ultravioletas o terapias basadas en la luz con utilidades psicológicas.
Una de las características fundamentales de la luz artificial es la facilidad para ser manipulada. Por ello su gran versatilidad y su gran abanico de aplicaciones. 
Otra de las posibilidades, que la hace tan atractiva, es la de cambiarle los colores.
Sin embargo, debemos intentar aprovechar la luz natural ya que las propiedades lumínicas son mejores.

Una de las diferencias que hay entre la forma de proyección natural (solar) y la artificial es que la luz que utilizamos en casa consume muchos recursos, mientras que la luz natural, no sólo no consume, sino que además aporta energía.

Lo que sucede es que ahora dependemos totalmente de la energía eléctrica y nos sería muy difícil vivir sin ella porque la luz eléctrica ha cambiado el ritmo de nuestras vidas.

La luz artificial no se proyecta de la misma forma que la natural. Los rayos de luz blanca natural llegan a nosotros paralelos entre sí. La luz artificial, se proyecta de forma cónica. Los rayos de luz salen del objeto luminoso (una bombilla por ej.) y van en todas las direcciones de forma que los rayos adoptan una forma de cono.

La diferencia entre estos dos tipos de proyección es la posición del objeto que produce la luz. El Sol se encuentra tan lejos de la tierra que los rayos se proyectan como si vinieran del infinito. Los rayos de luz procedentes de una bombilla se encuentran muy cerca y por eso tienen la forma cónica. 

El origen de la luz artificial. Funcionamiento básico de una lámpara incandescente.

Se habla de luz artificial cuando se describe a la que surge como consecuencia de una conexión eléctrica o se hace posible a través del gas. 
El origen de la luz artificial es atribuido habitualmente a Thomas Alva Edison, quien en 1879, realizó una bombilla práctica y viable, que lució durante 48 horas ininterrumpidas.
La lámpara incandescente fue uno de los inventos que revolucionó los modos de iluminación hasta entonces conocidos (lámparas de gas, velas, etc.).
El funcionamiento básico de la lámpara incandescente consta de un filamento de tungsteno muy fino, encerrado en una ampolla de vidrio en la que se ha hecho el vacío o se ha rellenado con un gas inerte, para evitar que el filamento se volatilice por las altas temperaturas que debe alcanzar. Se completa con un casquillo metálico, en el que se disponen las conexiones eléctricas.

Paso a paso, el funcionamiento:



Cuando se completan todos estos pasos, se pulsa el interruptor conectado a la electricidad y se enciende la luz: